Segundo encuentro del Voluntariado Universitario “Jóvenes por Comunasmás Participativas"

Jornadas: "ESTADO, UNVIERSIDAD PÚBLICA Y BARRIOS, CONSTRUCTORES DE UN NUEVO PARADIGMA EN POLÍTICAS SOCIALES"

El día 25 de Junio apenas pasadas las 19hs se llevó adelante el Segundo Encuentro del voluntariado universitario “Jóvenes por comunas más participativas” en la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de Buenos Aires (sede constitución, Santiago del Estero 1029). El encuentro versó sobre las “Políticas públicas inspiradas en problemas sociales concretos”. 
La primera oradora la licenciada Ana Blac, socióloga, integrante del Centro de Estudios Políticos (CEP) de la Cámpora, realizó una introducción acerca de qué tipos de políticas públicas se pueden llevar adelante por parte del Estado. Ella decía que “las políticas sociales son instrumentos para mejorar la vida de las personas, pero no todos los Estados las entienden como herramientas [...] hay distintos tipos de políticas públicas, que se condicen con diferentes tipos de Estado. Están las mitigadoras, que brindan beneficios no derechos, este tipo de políticas son las que podíamos ver en los ’90 o las que vemos en el día a día en la gestión PRO”. Las políticas compensatorias, buscan igualar derechos, compensar en este caso a partir del 2003 las malas políticas públicas llevadas por los diferentes gobiernos desde Perón. Y por último las políticas públicas promocionales que no son derechos pero buscan un acompañamiento de la sociedad, se construyen desde la sociedad misma, como es el caso de la AUH (Asignación Universal por Hijo). “Nuestro Estado tiene un rol fundamental en conjunto con la sociedad civil en cuanto a la recuperación de derechos y políticas sociales [...] un Estado liberal lo que hace es tercierizar la ayuda social, mucho ‘oenegismo’, es decir se le paga a una ONG para que de ‘ayuda social’ porque ese Estado es incapaz de hacerse cargo de las necesidades y derechos de sus habitantes”. La licenciada dice que desde el Gobierno Nacional “las políticas sociales se realizan desde el mismo petitorio, por eso se dice que surgen desde la sociedad civil, mientras que en un Estado neoliberal los programas sociales ya bajan desde organismos internacionales, como el banco mundial (a modo de ejemplo) donde no importaba si la persona era un pobre en Tucumán o en el conurbano”, el tratamiento del asunto por parte del Estado se vuelve caridad. “Hoy en desde nuestro Gobierno existe, por ejemplo, la AUH que permite que un millón y medio de pibes  tengan los mismos derechos que los hijos de padres que trabajan”.

En segundo lugar el licenciado Pedro Aballay, trabajador social, Coordinador del Centro de Acceso a la Justicia de la villa 21/24, comentó las diferentes “políticas sociales” que existen en la ciudad de Buenos Aires, bajo la gestión PRO, “la mayoría son programas que ya existían de gestiones anteriores y el actual mal funcionamiento de los programas hace que la asistencia social sea prácticamente nula”. En este contexto el licenciado señalaba que la mayoría de los programas del gobierno de la Ciudad “expulsan a las personas, se dan de baja sin explicación, se reducen los montos (de dinero en el caso de tarjetas sociales o tickets) y de un día para el otro podés estar afuera. La política macrista es expulsiva”. Entre otros programas que comentaba el licenciado se encuentra el de viviendas al cual “las personas en situación de villa no pueden acceder, es un programa vacío de contenido, los montos de subsidio son bajísimos (entre $700 y $1200) y no contempla que las personas alquilan dentro de las villas [...] para que nos demos una idea de cuales son las prioridades del gobierno de la ciudad traje algunos números. La gestión Pro designa la mayoría de su presupuesto educativo a la educación privada. Todos estos programas que nombrábamos de gobierno, con sus fallas, sólo ocupan el 12% de el dinero que el gobierno de la ciudad destinó a la educación privada”.
La tercera protagonista de esta charla fue Vanesa Conicella, trabajadora social de los Centros de Acceso a la Justicia. “La dinámica del trabajo en los centros es la dinámica de Nación, todo es mucho más ágil y a la hora de trabajar con el gobierno de la ciudad encontramos muchas trabas. Lo que primero buscamos es generar un vínculo honesto con la persona, por eso investigamos los distintos programas para saber como podemos ayudar”. Se busca que las personas sepan qué se puede hacer en los centros y hasta dónde los profesionales pueden ayudar. El Estado Nacional lo que hace es hacer cumplir y dar a conocer los derechos que tienen las personas, sobre todo en los sectores más vulnerables de la sociedad “la lógica del macrismo estotalmente caritativa, la de la ayuda. Las personas tienen que conocer sus derechos y saber que hay otro tipo de Estado posible. El Pro, a través de su "oenegismo" lo que hace es dejar los derechos de las personas al mercado, si vos podés que bueno y vos si no jodete”.

La licenciada Florencia Carignano deja en claro su preocupación por el creciente oenegeismo por parte del Gobierno de la Ciudad, nos cuenta que “frente a las problemáticas sociales el gobierno (de la ciudad) está resolviéndolos mediante la institucionalización de los pibes en manos de diferentes ONG a las que se les paga una suma muy alta de dinero por cada chico que separan de su núcleo familiar”. Lo que brinda el macrismo es caridad y no derechos. 

En último lugar cerrando la mesa de oradores habló la Licenciada Florencia Carignano, Directora Nacional de los Centros de Acceso a la Justicia: “El acceso a la justicia es un derecho humano fundamental, porque a través de la justicia se pueden cumplir  todos los demás derechos, es una herramienta que transforma las relaciones de poder que perpetúan la exclusión y la pobreza. Acceso a la Justicia no es el derecho a un tribunal, desde el 2003 la justicia es la justicia social”. En este marco señalaba: “La justicia, si uno pregunta en la Villa 31, qué es, te van a decir que es poder acceder a una vivienda digna, que sus hijos puedan ir a una escuela y seguramente si uno pregunta  a una persona de Barrio Norte probablemente te diga ‘La justicia es pagarle a un abogado y que me defienda’. Afortunadamente con este gobierno pudimos ir más allá en la políticas públicas, ya no nos ocupamos sólo de las personas que no tienen para comer, los Centros de Acceso a la Justicia son el sueño de un país más justo. Un país más justo es con una justicia dónde los jueces puedan entender qué hacer cuando una persona que cae detenida proviene de una villa”. Haciendo un poco de historia en lo que respecta al Ministerio de Justicia y las políticas públicas del primer gobierno kirchnerista remarca: “Cuando Néstor asumió en el 2003 el Estado no estaba capacitado para entender la justicia social, el rol del Ministerio de Justicia era (como dicen los militantes) rosquear con los jueces; hoy tenemos programas de acceso a la justicia”. La licenciada dice, muy orgullosa que el rol del Ministerio de Justicia hoy es “llevar el Estado a dónde había desaparecido”. Se toma conciencia de que el Estado debe estar allí en donde están los sectores más vulnerables ya que “la clase medía conoce sus derechos”.  
Dada la primera introducción sobre el rol de la justicia en la última década la licenciada cuenta para la audiencia lo difícil que fue que las personas contaran con los Centros como un recurso que no va a desaparecer de la noche a la mañana.  “El acceso a las villas fue por medio de actores que se quedaron en los 90’, cuando no se quedó nadie, como los curas villeros, ellos nos daban legitimidad que el Estado había perdido”. Las personas tenían que entender que “nosotros estábamos de forma permanente y para hacernos cargo de problemas concretos”. En el marco de la inserción de los CAJ (Centros de Acceso a la Justicia) cuenta que en diferentes lugares hay diferentes estrategias para trabajar, ya que los problemas en Capital Federal o el Conurbano no son de ninguna forma los mismos que puede haber en Córdoba, Tucumán o Salta. 
Para cerrar el encuentro la licenciada Carignano remarca: “No somos el Ministerio de Justicia, somos la decisión política de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner de mejorar la vida de las personas, porque la política es eso, es transformar la vida de las personas en una vida mejor”.